GESTIÓN INTEGRAL DE RESIDUOS NO PELIGROSOS

Como primer paso, antes de la instalación de equipos en las instalaciones del cliente, se realiza un estudio de adaptación de la oferta o estudio económico atendiendo a los medios de que dispone cada centro y la producción de residuos de los mismos. De esta manera, se establece tanto el tipo de contenedor más adecuado como la frecuencia de recogida, manteniendo un servicio óptimo y asegurando la limpieza de las instalaciones en todo momento.

Proceso de recogida
Proceso de recogida

Los diferentes materiales recogidos son previamente seleccionados en origen y depositados en el contenedor o compactador adecuado, proporcionados por C.T.C.

Proceso de Transporte
Proceso de Transporte

Se realiza en vehículos especialmente adaptados para el transporte de contenedores, con diseños de cajas adecuados para distintos tipos de residuos. Contamos  con las autorizaciones necesarias para la realización de este servicio. Nuestros vehículos cuentan con servicio GPS de modo que garantizan a nuestros clientes un servicio de localización en el acto además de un seguimiento del mismo.

Gestión final y trazabilidad
Gestión final y trazabilidad

C.T.C., garantiza la entrega de los residuos recuperados a un gestor final cumpliendo así la trazabilidad de los residuos desde su recogida hasta su valorización como materia prima secundaria.

Proceso de gestión de residuos
Proceso de gestión de residuos

El primer paso para la gestión de residuos consiste en una primera visita de nuestro departamento técnico-comercial donde conoceremos el espacio del que dispone el centro productor de estos residuos.

Allí, recogeremos la información de cantidad generada, elementos para el acopio actuales y calificaremos el tipo de gestión que se le debe aplicar. Seguidamente, y en función de la información recopilada, se les informa de nuestra propuesta de gestión que consideremos más eficiente técnica, económica y ambientalmente.

En función de la segregación en el centro productor de los residuos, los dividimos en:

  • NO VALORIZABLES: aquellos que, por su composición o contaminación no son aptos para su reutilización, recuperación, reciclado y valorización. En este caso los residuos recogidos por C.T.C. Servicios Ambientales son trasladados al centro de eliminación autorizado más cercano al centro productor del residuo.
  • VALORIZABLES: Son aquellos aptos para la recuperación, reciclaje o valorización energética, y son básicamente plásticos, papel y cartón, madera, chatarras, RAEE’s (residuos de aparatos eléctricos y electrónicos) y residuos en general con un alto poder calorífico. Por cumplimiento de la Ley de Gestión de la Calidad Ambiental, en la que se establece que ningún residuo puede ser eliminado en vertedero directamente sin segregación alguna, C.T.C. lleva todos estos residuos al a uno de nuestros centros de transferencia, donde se segregan en distintos tipos valorizables cumpliendo así el productor la normativa vigente.

Los residuos selectivos o recuperados por C.T.C., son los siguientes:

PLÁSTICOS

Esta tipología de residuos se entrega para su reciclado a la empresa homologada para la valorización de materiales plásticos RECICLADOS LA RED, S.L. Entre ellos, y fundamentalmente:

    • Polietilenos de baja densidad como embalajes, bobinas, tuberías, etc.
    • Polietilenos de alta densidad como botes de envases caducados, tuberías, cajas de plástico, etc.
    • Polipropileno como cajas, tapones y otras cápsulas, envases de productos hortofrutícolas, etc.

PAPEL Y CARTÓN

Una vez recuperado, lo llevamos a nuestras instalaciones donde lo clasificamos según calidades, eliminando cualquier material impropio que haya podido contener y, posteriormente, lo prensamos para su valorización. En sus diversas modalidades, como:

    • Recortes de cartoncillo
    • Cartón de embalajes
    • Planchas
    • Cartón paja
    • Papel de oficinas, etc.

MADERA

Destacamos en esta categoría los palets, que reparamos y comercializamos nuevamente. El resto de residuos de madera se clasifican según tipología, se trituran y se produce de esta manera materia prima para consumidores de cara a fabricación de tableros, biomasa y/o valorización energética..

CHATARRAS FÉRRICAS

Una vez en nuestras instalaciones, son clasificadas según tipología, prensadas y/o cizalladas según calidades para su posterior proceso de reciclado.

CHATARRAS NO FÉRRICAS

Se incluyen en esta categoría los residuos procedentes de residuos urbanos (RU). Se destinan en su totalidad a nuestras instalaciones, que, tras un proceso de recuperación y separación por tamaño y tipo de material, se introduce en una planta fragmentada para su posterior venta.

RESIDUOS DE APARATOS ELÉCTRICOS Y ELECTRÓNICOS (RAEE´S)

Se recogen los que provengan de RU y, en ningún caso, se realizará una recogida selectiva y específica de dichos materiales. Se llevarán a un gestor final para su descontaminación, reciclado y valorización.

GESTIÓN INTEGRAL DE RESIDUOS PELIGROSOS

Previamente a la colocación de los contenedores para el almacenamiento temporal de residuos peligrosos (RRPP), se entregará al cliente el Documento de Aceptación de los mismos, pudiendo tramitar la Inscripción como Pequeño Productor de Residuos Peligrosos, en caso de ser necesario.

Proceso de recogida. Los residuos almacenados en las instalaciones del cliente, por un tiempo no superior a 6 meses, debidamente identificados, serán retirados por un operario debidamente formado para esta actividad, entregando al cliente un Documento de Control y seguimiento, donde se identifica, el productor, el residuo, la fecha de recogida el gestor transportista, el vehículo y el conductor.

Proceso de transporte. Los residuos son acondicionados en un vehículo específico, autorizado mediante el reglamento ADR (transporte de mercancías peligrosas), identificándose con las señales de peligro correspondientes al tipo de residuo transportado, y en las condiciones de estanqueidad exigidas por ley.

Gestión final. El residuo transportado se entregará en las instalaciones de un gestor final autorizado por el órgano ambiental competente de la Comunidad Autónoma correspondiente. Una vez recepcionado por el destino final, se informa al cliente de la cantidad de cada residuo entregado, para mantener el control de la producción exigido en la legislación vigente.